Сamas eléctricas

 

El número de nuevas empresas en la economía que establece su target entre las personas mayores, y que se está comenzando a conocer como “economía plateada” va en aumento. Estas empresas ofrecen tecnología y servicios para mejorar la calidad de vida de las personas en el último tramo de sus vidas. El envejecimiento de la población en los países desarrollados es un hecho, por ese motivo es normal que cada vez más ya más empresas se centren en ofrecer a los abuelos y las abuelas una mayor calidad de vida, con todos los elementos e innovaciones disponibles a día de hoy. Sobrellevar del mejor modo posible  la enfermedad de Alzheimer, encontrar los mejores accesorios ortopédicos para los trastornos de movilidad y paliar la tristeza y el peligro que supone a ciertas edades la soledad es la propuesta de alguna de estas empresas.

Si observamos la situación demográfica y los pronósticos de la proporción de la población de menos y más de 60 años, vemos como el grupo que supera los 60 sobresale cada vez más. Y todas las previsiones apuntan a que en un futuro la curva será aún más aguda y tendente hacia el envejecimiento poblacional. No es de extrañar que el mercado de consumo se haya centrado en las necesidades de este grupo cada vez más numeroso de población. Si a ello sumamos una merma del poder adquisitivo de la clase media, la precarización laboral, la dificultad para entrar en el mercado de trabajo que sufren los jóvenes más centrado y una crisis tras otra, nos damos cuenta de que la abuela con su casa pagada y una pensión estable y asegurada es un público objetivo muy rentable para las empresas.

El número de nuevas empresas en la "economía plateada" está creciendo activamente cada año en todo el mundo. Especialmente en aquellos países donde las personas de los grupos de mayor edad (65-75 +) son una parte significativa de la población. El pionero y líder aquí es Japón. La población de más de 65 años en 2016 era del 26,7% en el país, la esperanza de vida promedio es ahora de 84 años. A principios de la década de 2000, debido a una disminución en la tasa de natalidad y un aumento en el número de pacientes con demencia, el gobierno japonés reformó radicalmente el sistema de atención a personas mayores e introdujo un nuevo sistema de seguro.

En Japón la empresa MJI lanzó Tapia, una "criatura" en forma de huevo blanco con una pantalla que simula unos ojos. Tapia le dice a la persona anciana cómo vestirse de acuerdo con el clima, le recuerda que haga la llamada correcta o, lo que es especialmente importante para las personas con enfermedad de Alzheimer, que realice algunas acciones repetitivas, como ducharse o tomar sus medicamentos. También controla la seguridad: si una persona mayor no responde una llamada, el robot transmitirá a los seres queridos la imagen de lo que realmente está sucediendo. Además, puede "cooperar" con electrodomésticos "inteligentes" y ayudar a controlar de forma remota el aire acondicionado, la luz, la televisión, etc. Una de las cualidades más importantes de Tapia para las personas con demencia es su capacidad para hablar.

Otra área de trabajo es el hogar de una persona mayor. Después de todo, si organiza correctamente el espacio de su departamento o casa a tiempo, puede extender el tiempo de vida independiente en su hogar, porque la decisión de transferir a una persona mayor a una pensión bajo la supervisión de un equipo médico no es fácil para ninguna familia.

Incluso los cambios aparentemente menores en la casa pueden mejorar la calidad de vida de una persona mayor. Para las casas de dos pisos, se ofrecen ascensores en lugar de escalones o ascensores eléctricos para cochecitos. Estufas de gas seguras, interruptores de grifos simplificados, manijas de puertas convenientes, cajones fáciles de abrir, pasamanos cómodos, duchas con asiento...Además de camas eléctricas, sillones de relax o colchones y almohadas ortopédicas. Adaptar los espacios para la movilidad en silla de ruedas o con andador es también importante.

Existen también startups que ofrecen servicios que ponen en contacto a los ancianos con profesionales que estén entre sus vecinos, de modo que estos les ayudan en las labores que los ancianos no pueden hacer por sí solos, a cambio de remuneración. El concepto se llama "aldea virtual": ofrece desde reparaciones a entrega medicamentos a los clientes, los lleva a las tiendas, corta el césped, hace el trabajo doméstico...

La economía plateada es algo que va a seguir creciendo y se calcula que en Europa en 2025 supondrá un 38% de los empleos. Nuestros abuelos y abuelas bien se merecen que nos preocupemos por ellos.